Ficha técnica
Título original: Der Richter und sein Henker
Autor: Friedrich Dürrenmatt
País: Suiza
Idioma: Alemán
Traductor: Juan José del Solar
Fecha edición original: 1950
Fecha traducción: 2000
ISBN 13: 978-84-8310-666-2
ISBN 10: 84-8310-666-3
Núm. Páginas: 176
Editorial: Tusquets
Género: Policíaco
Sinopsis: Un agente de policía aparece asesinado en su coche en el arcén de una perdida carretera suiza. Muy escasos son, al principio, los indicios que den sentido a esa muerte extraña. Ni siquiera su superior y encargado del caso, el comisario Bärlach, sabe con precisión qué ocurre. Pero contra lo que pudiera desprenderse de su inexplicable apatía, Bärlach, paladín de antiguos valores, sabe adónde va y tiene su propia idea de la justicia y de cómo administrarla. Los interrogatorios y las investigaciones revelan poco a poco una compleja trama en la que están involucrados sospechosos e investigadores y donde nada responde al azar o es lo que parece.
El juez y su verdugo es la primera novela policíaca de Dürrenmatt y en ella ya se aprecia su maestría en mezclar sátira y observación, meditación e ironía, en una historia aparentemente anodina, pero cargada de significación.
Reseña
La historia comienza con el descubrimiento del cadáver del teniente de policía Schmied, que aparece en su coche con un disparo en la sien y, sorprendentemente, mientras se están dando todavía los primeros pasos para averiguar qué ha sucedido el comisario Bärlach declara tener un sospechoso.
Con la investigación de Bärlach y su compañero temporal Tschanz, el lector tiene entre manos un rompecabezas que en principio parece de sencilla resolución, pero que conforme va avanzando se complica de tal manera que, aunque tiene todas las piezas necesarias en sus manos no es capaz de encajarlas correctamente hasta el final.
Éste es uno de esos libros que uno al llegar a la última página cierra pero no termina, porque los temas expuestos son tan complejos que no se pueden llegar a dilucidar en ciento setenta y seis páginas, requieren de una mayor reflexión.
Aquí lo que está en juego es la justicia, pero ¿se puede obtener justicia por medios injustos? ¿Es equitativo condenar a alguien por un crimen que no ha cometido como contrapartida de los que si cometió? Éstas y otras cuantas cuestiones más son las que plantea esta magnífica novela.
La historia comienza con el descubrimiento del cadáver del teniente de policía Schmied, que aparece en su coche con un disparo en la sien y, sorprendentemente, mientras se están dando todavía los primeros pasos para averiguar qué ha sucedido el comisario Bärlach declara tener un sospechoso.
Con la investigación de Bärlach y su compañero temporal Tschanz, el lector tiene entre manos un rompecabezas que en principio parece de sencilla resolución, pero que conforme va avanzando se complica de tal manera que, aunque tiene todas las piezas necesarias en sus manos no es capaz de encajarlas correctamente hasta el final.
Éste es uno de esos libros que uno al llegar a la última página cierra pero no termina, porque los temas expuestos son tan complejos que no se pueden llegar a dilucidar en ciento setenta y seis páginas, requieren de una mayor reflexión.
Aquí lo que está en juego es la justicia, pero ¿se puede obtener justicia por medios injustos? ¿Es equitativo condenar a alguien por un crimen que no ha cometido como contrapartida de los que si cometió? Éstas y otras cuantas cuestiones más son las que plantea esta magnífica novela.
—Vea usted —contestó Bärlach sopesando cada una de sus palabras con el mismo cuidado que Tschanz—, mi sospecha no es una sospecha científicamente válida desde una perspectiva criminalística. No tengo razones que la fundamenten. Ya ha visto usted lo poco que sé. En realidad, sólo tengo una idea de quién podría ser tomado en consideración como asesino; pero esa persona aún tendría que producir las pruebas de su culpabilidad.