Ficha técnica
Título original: Ruinas
Autor: Rosalía de Castro
País: España
Idioma: Castellano
Traductor: —
Fecha edición original: 1866
Fecha traducción: —
ISBN 13: 978-84-15458-35-7
Núm. Páginas: 88
Editorial: Eneida
Género: Grandes clásicos | Novela corta
Sinopsis: Ruinas es una entrañable historia centrada en la sólida amistad y solidaridad entre tres habitantes de una pequeña villa gallega, ejemplares por sus valores morales, pero inadaptados en un medio social opresivo a causa de su independencia y libertad.
La brillante prosa de Rosalía, cincelada en un quehacer poético de una maestría inconmensurable, se despliega en esta pequeña gran obra en todo su esplendor literario y humano.
Reseña
Mi valoración final de un libro se debe a varios factores que no siempre tienen que ver con mi gusto personal, hay lecturas de las que no he disfrutado apenas y a las que, sin embargo, he valorado generosamente por otras razones como puede ser, por ejemplo, que la obra en cuestión me parezca importante por algo en particular, pero en el caso de Ruinas he de confesar que he disfrutado al mismo tiempo que sufrido por la suerte de los tres personajes que Rosalía de Castro nos presenta en esta novela corta, que aun estando escrita en prosa no deja de tener algo de lírica.
Doña Isabel y don Braulio, ambos ya personas de cierta edad, saben llevar mejor que el joven hidalgo las calamitosas circunstancias de su vida, pero Montenegro no es capaz de hacer frente a su triste situación cuando se ve despreciado y denigrado por la joven a la que ama que, ironías de la vida, goza en presente de una posición acomodada gracias a que en pasado su abuelo fue el zapatero del padre del hombre al que hoy le niega un baile por tener sus zapatos rotos.
Hay dos clases de ruinas en esta novela: la pérdida de fortuna a la que se ven sometidos Doña Isabel, don Braulio y el hidalgo Montenegro, y la decadencia de la sociedad en la que viven, que parece compadecerlos pero en el fondo los desprecia y por eso intenta humillarlos. Una sociedad que está en declive y de la que los tres desafortunados amigos no son más que él último vestigio de dignidad, honradez, compasión..., que le queda a un mundo que gira al son de los reales y de las apariencias.
... no puede negarse que el hombre es el ser más ingrato de todos los seres.No puede negarse, no, ésa es la triste conclusión.